Soy adicta a ti, sos como la nicotina de ese cigarrillo que me fume una noche de distracción en la que no logre distraerme. Como aquel cigarrillo me intoxicas, pero me gustas. Me encanta, pero aunque me haces daño, sigo. Sos como una adicción difícil de combatir. Sos mi cura y mi enfermedad.
En fin, soy adicta a ti.